Nina está en tercero de primaria. Tiene los ojos azules, el cabello azul y una sonrisa hermosa. Siempre viste con vestidos de colores. Pero no se ríe mucho y a veces se siente mal consigo misma porque a veces le cuesta decir las palabras. Su mamá le dijo que eso se llamaba “tartamudez”.
Por su tartamudez, la escuela es muy difícil para ella. Sus compañeros se burlaban de cómo hablaba, porque no la entendían. Con el tiempo, Nina fue hablando cada vez menos. Por eso, ya no habla con los otros niños y no tiene amigos en la clase. Nina se sienta sola en la parte de atrás del aula. Incluso se quedaba ahí durante los recreos.
¿Cómo crees que se siente Nina cuando todos se ríen de ella?
Hace un mes, Nina recitó un poema en clase y tuvo que hacer muchas pausas. Algunas palabras eran difíciles de entender y el poema no tenía sentido. La maestra trató de calmar a la clase, pero los niños se reían más fuerte.
¿Qué piensas?
¿Deben los niños actuar así?
Nina gritó: "¡Por favor, paren!" Aunque le costaba hablar, los niños entendieron lo que quería decir. Estaba llorando como nunca antes. La risa se detuvo y el aula quedó en silencio. Nina temblaba y no podía dejar de llorar. Salió del salón sin decir una palabra.