Hanna miente y dice que no puede ayudar a Paulina. La maestra sabe que esto es una excusa. Sin ayuda, Paulina tiene que ponerse al día sola con muchas tareas. Aun así, después del accidente, Paulina ya es tan egoísta como antes.
Pero Hanna se siente mal por no ayudar. Sabe que perdió la oportunidad de demostrar lo que significa ser amable y de enseñar con el ejemplo. También se siente decepcionada consigo misma por haber mentido a la maestra Honey.
Esta historia nos enseña la importancia de respetar, ayudar a los demás y compartir. Gracias a estos valores, creceremos como personas empáticas, generosas y positivas, en lugar de egoístas.