Bella es una curiosa conejita que vive en un jardín lleno de colores junto a otros animales e insectos. Le encanta saltar entre las flores, disfrutar del paisaje y hacer amigos con todos los que conoce. Su madriguera es acogedora, y aunque Bella es muy amigable, a veces no entiende por qué los demás actúan de manera diferente.


Lo que más espera cada año es la Gran Fiesta del Jardín, donde todos se reúnen para jugar y compartir historias.


¿Alguna vez te has sentido tímido o nervioso al conocer gente nueva?

El día de la fiesta, Bella nota a un nuevo visitante en el jardín: un erizo llamado Henry. Bella intenta diferentes maneras de acercarse a él. Lo invita a jugar, le ofrece una flor e incluso pide consejo a sus amigos. Pero cada vez, Henry se enrolla y se hace una bola.

Bella empieza a sentirse frustrada. Entonces, recuerda una historia que su madre le contó. Sabe que cada animal tiene su propia manera de mostrar sus sentimientos. Piensa un momento y se da cuenta de que debe ser más paciente con Henry.


¿Qué crees que debería hacer Bella ahora?

Bella decide acercarse a Henry una vez más. Se sienta a su lado y empieza a hablar sobre la Fiesta del Jardín. Le cuenta todas las cosas divertidas que podrían hacer juntos, pero también le dice que está bien si aún no se siente listo para unirse.


Bella tiene dos opciones: