Isabelle espera en su casa a que sus compañeros lleguen a su fiesta. Mira el reloj mientras pasa el tiempo. Su madre se da cuenta de que sus compañeros no vendrán. Comienza a jugar con su hija y luego soplan las velas en la tarta de cumpleaños.

Isabelle ahora entiende que a veces es difícil ser aceptado si eres diferente. También entiende que su madre es su mejor amiga y siempre lo será.

No importa cuáles sean las diferencias para que alguien sea tu amigo. Si aceptas a los amigos que son diferentes, todos serán felices al final.