Matt se quedó afuera, pero al ver lo bien que lo pasaban sus compañeros, empezó a sentirse triste. Cuando la visita terminó, todos hablaban emocionados sobre sus nuevos amigos. De camino a casa, Matt se dio cuenta de que se había perdido algo especial y se arrepintió de no haber participado. Decidió que la próxima vez, daría una oportunidad a los demás.
A veces, nos cuesta entender a los demás. Lo importante es darles una oportunidad y aprender juntos. ¡Todos podemos ser amigos!